El Fantasma del Terror

Es otra la historia, después del 11-S. Para unos es el icono de cómo la violencia humana puede generar los temores más hondos. En cambio para otros, representa la mejor justificación de los EE.UU, en su intento de aplicación de una política exterior militarizada. Sea como fuere, en este informe, vamos a esbozar los argumentos para mejor análisis.

Es cierto que a raíz del atentado de las torres gemelas, el tema cobra vitalidad. De tal forma que rápidamente el gobierno de Bush, planifica una contraofensiva para hacerle frente al terrorismo internacional, en aquel momento. Conjuntamente a la desviación óptica de otros temas también importantes (pobreza, mala distribución del ingreso, el problema del VIH, etc) Bush le saca recursos al congreso Norteamericano para iniciar una campaña internacional con el objetivo de aniquilar a las facciones terroristas fundamentalistas. En opinión de analistas internacionales la “guerra contra el terrorismo” a nivel global ha costado ya 357 billones de $. Cifra calculada por Chris Abbott, Paúl Rogers, y Jhon Sloboda en su informe para FRIDE, titulado: “Respuestas globales para amenazas globales”, pag 18, septiembre 2006.

Los costos de la guerra contra el terror, no son solo económicos, sino también humanos. E inclusive muchos piensan que son mayores que los muertos en atentados terroristas. Militares fallecidos, heridos, suicidados, mutilados, etc. Civiles muertos, fragmentados y protagonistas de guerras civiles, en su propio territorio.

Producto de esa estrategia, la invasión a IRAK y el proceso de democratización del Medio Oriente, han dado lugar a una escalada de actos de terror en las capitales de países aliados de los EE.UU (Caso de España e Inglaterra). Entonces a mayor represión los atentados han ido en aumento. Pero como un acto de reacción. El principio de la Física: A toda acción existe una reacción, es fácilmente aplicable a la realidad social. Por ende a mayor política exterior dura, mayor son el número de los atentados terroristas. Tampoco debemos olvidar que la invasión a IRAK, fue un hecho que no contó con la aprobación del Consejo de Seguridad de la ONU, ni así mismo con la aprobación de la comunidad internacional.


El hecho de que hasta el día de hoy, el terrorismo internacional no sea significante para un amplio sector académico, no quita la condena del mundo en general. La violencia debe ser desterrada en cualquiera de sus formas.

Al-Qaeda es sin dudas el grupo terrorista más famoso, aunque hasta el día de hoy, no encuentren a Osama Bin Laden. Muchos intuyen que Osama estaría muerto. Este grupo radical, para los entendidos no es una organización, sino al contrario una ideología que tiene objetivos claros como: La eliminación de Israel, creación del estado Palestino, apoyo a grupos con igual doctrina en el mundo Árabe.

El otro producto, de la lucha contra el terrorismo, es la dación de leyes antiterroristas y leyes anti- inmigración. La paranoia mundial, esta presente en muchos países. El mundo así concebido, requiere de una seguridad que pase necesariamente, por una voluntad diplomática de las naciones, a la hora de encontrar soluciones pacíficas a los graves problemas mundiales.

Frente a esta realidad inestable, el terrorismo internacional se erige como un fantasma reaccionario, igualmente en esas condiciones, el afán de protegerse ha llevado a muchos países como: EE.UU, China, Corea del Norte, Irán a la producción masiva de armas nucleares.